Los procesos educativos en derechos humanos constituyen un
pilar fundamental del mandato de la Defensoría del Pueblo, conforme al artículo
2 de la Ley N.º 870. En cumplimiento de este mandato, la institución impulsa
acciones sistemáticas de formación y sensibilización orientadas a construir una
cultura de respeto, promoción y defensa de los derechos humanos en todo el
territorio nacional.
Estos procesos se diseñan con metodologías participativas,
inclusivas y contextualizadas, permitiendo que la educación en derechos humanos
no solo transmita conocimientos, sino que también fortalezca habilidades y
fomente actitudes comprometidas con la dignidad, la igualdad, el pluralismo y
la justicia social. Las actividades formativas abarcan desde sesiones
informativas y talleres hasta programas integrales de capacitación,
desarrollados en modalidades presenciales, virtuales o híbridas, y con enfoques
como el intercultural, de género, de sostenibilidad ambiental, comunitario e
inclusivo. Cada proceso busca responder a las realidades específicas de los
territorios y fortalecer la acción colectiva e individual en favor de una
sociedad más justa y democrática.